La pandemia ha puesto el foco en la necesidad de las empresas de adaptarse a las nuevas tecnologías.
Aquellas empresas que estaban digitalizadas han mejorado su comunicación con los clientes, aprovechado nuevas oportunidades de mercado.
La crisis sanitaria, ha supuesto un incremento de las ventas online, modificando el comportamiento del consumidor.
Según, Astound Commerce, la previsión es que las ventas online continúen creciendo en el 2021. ¡Estamos ante un movimiento nunca antes visto!
Por lo tanto, está en las manos de las empresas subirse a la era digital o quedarse relegadas a un segundo plano, ya que hoy en día, prácticamente si no estás en internet no existes.
¿Sabías que el 72% de estos internautas según el INE compra online? El comercio digital en nuestro país supera la media mundial.
Con estas cifras, queda más que patente que el comercio online ha venido para quedarse.
Las empresas ante el desafío digital
Ante este nuevo escenario digital, las marcas tienen el reto de reinventarse y posicionarse como referentes en el mundo online. Además, la digitalización supone para las pymes un gran avance, ya que un pequeño desembolso, pueden alcanzar a un gran número de clientes potenciales, que con el establecimiento físico no es posible.
¿Qué beneficios tiene para las empresas la digitalización?
1. Mejora de la visibilidad ante su público objetivo
2. Incrementar el alcance de su negocio
3. Mejorar su posición en el mercado
¿Qué pasará si tu empresa no tiene presencia online?
Es un hecho que la transformación digital mejora los resultados empresariales. Informes publicados por compañías como Dell EMC manifiestan que aquellas empresas que no digitalicen su negocio en el 95% de los casos acabarán por desaparecer tarde o temprano. Además, la digitalización ayuda a las empresas a aprovechar nuevas oportunidades de negocio al contar con más de un canal de comunicación empresa-cliente.
Estrategia comercial omnichannel
Contar con una estrategia comercial en la que la empresa está presente en varios canales beneficia a la repercusión, visibilidad y promoción de la empresa.
Por ejemplo, una empresa que cuenta con una página web, incrementa su valor añadido al cliente, ya que este puede visitar la web e informarse antes de tomar la decisión de compra. Es decir, una estrategia omnicanal consiste en realizar acciones de marketing online y offline de manera coordinada y coherentes con la estrategia de marca.
Todo ello, mejora positivamente el posicionamiento de la empresa en el mercado, transmitiendo la imagen de una marca sólida, segura y confiable, que se preocupa por estar actualizada.
Una de las ventajas de las estrategias omnichannel reside en que todas las acciones realizadas son medibles, por lo que se puede adaptar la estrategia en función de los resultados obtenidos.
Como agencia especializada en branding y comunicación, te recomendamos estar actualizado y apostar por la digitalización, ya que la presencia en internet es imprescindible para crecer en un mercado cada vez más competitivo y globalizado.
Si quieres más información sobre cómo digitalizar tu empresa, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.
